Entrevista al fotógrafo ganador del primer premio de la categoría Documental interactivo online del concurso multimedia World Press Photo 13 por la obra Alma. Hija de la violencia.
Cada vez más, la fotografía tiende a convergir con otros medios de expresión visual, textual y audiovisual; y, tanto a nivel profesional como amateur, las imágenes fotográficas no son ajenas a la relevancia social de Internet.
En este contexto, la fundación World Press Photo puso en marcha hace dos años el Concurso multimedia: un certamen que considera complementario al concurso fotográfico original y con el que responde a su compromiso de proporcionar una plataforma a las prácticas innovadoras en el campo del periodismo visual. Según las bases del concurso, las obras multimedia tienen que ser producidas para la web y deben incluir fotografía y/o vídeo en combinación (como mínimo) con animaciones, grafismos, ilustraciones, sonidos o texto.
En la novena edición de World Press Photo en Barcelona, la capital catalana será la única ciudad del Estado (y casi del mundo) en mostrar las nueve obras ganadoras de la tercera convocatoria del Concurso multimedia, que incluye tres categorías (Cortometraje online, Largometraje online y Documental interactivo), cada una de las cuales con primer, segundo y tercer premio.
Este año, dos de los primeros premios otorgados por el jurado de este concurso han sido para fotógrafos españoles. El máximo galardón de la categoría Cortometraje online se ha concedido al mallorquín Pep Bonet por la obra Into the shadows, y la máxima distinción de la categoría Documental interactivo ha sido para el autor de Palafrugell Miquel Dewever-Plana; quien, conjuntamente con la escritora francesa Isabelle Fougère, ha producido Alma. Hija de la violencia, la estremecedora historia de una joven exmarera de Guatemala.
Como nos cuenta Dewever-Plana, el género en el que ha sido premiado consiste en «un documental pensado y diseñado para la web, donde pedimos al internauta que sea activo y no pasivo frente a la pantalla y se convierta así, de alguna manera, en un actor indirecto de la historia». «Es una herramienta muy reciente», sentencia, «donde todo, aún, se puede y se debe inventar».
Dewever-Plana detalla que la producción empezó cuando «Alma aceptó ofrecernos su testimonio porque quería ayudar a otros jóvenes -sin importar de dónde eran: Guatemala, Francia, España, Estados Unidos…- a no terminar, a los quince o veinte años, como todos sus compañeros de esa época: en la cárcel o en el cementerio». Para responder a esta voluntad de la joven, él e Isabelle Fougère optaron por las herramientas multimedia.
«La historia que nos cuenta Alma es universal», dice Dewever-Plana. «Todos somos Alma. O, mejor dicho, todos podríamos serlo. Solo el entorno en el que un ser humano se desarrolla facilita, o no, caer en esos extremos utilizando la violencia como lenguaje para existir. Internet nos permite entrar en las casas y, por lo tanto, llevar esta reflexión a todas partes». Además, el autor destaca que otro atractivo del webdocumental es que no tiene límite de tiempo o de espacio. «En Alma», nos cuenta, «a parte de los cuarenta minutos de confesión de la protagonista, incluimos cientos de páginas informativas para entender mejor la situación. En ningún otro medio hubiéramos podido tener esta libertad».
Las páginas informativas y otros elementos más periodísticos de Alma se elaboraron bajo la dirección de Isabelle Fougère; mientras que Dewever-Plana se ocupó especialmente de la parte de imágenes y vídeos de la producción.
«Creo que no existe un patrón estándar de equipo para realizar un webdocumental», afirma el fotoperiodista. «Todo depende de la historia». En su caso, Dewever-Plana sostiene que, por el hecho de ser la historia de un mundo de hombres explicada por una mujer, «era imprescindible que fuera otra mujer quien entrevistara a Alma durante el rodaje. Por ello, pedí a Isabelle que formara parte de esta aventura. Fue ella quien dirigió la entrevista y creo que esto permitió a Alma, frente a otra mujer, ser sumamente honesta a la hora de sacar a la luz lo más doloroso de su experiencia». En este testimonio se ha basado también el libro ALMA (Blume, 2012), con relato literario de Fougère e imágenes de Dewever-Plana.
Preguntado sobre el potencial de las herramientas multimedia en el mundo de la fotografía profesional, Dewever-Plana afirma que, frente a la crisis económica de los medios de comunicación tradicionales, «Internet será sin duda el medio que nos permitirá [a los fotoperiodistas] seguir trabajando e informando». Para ejemplificarlo, el fotógrafo cuenta que hasta la fecha Alma ha registrado más de un millón de conexiones (a través de internet y de una aplicación gratuita para tabletas). «Un resultado sin precedentes que significa que nuestro trabajo puede tener un alcance mucho mayor utilizando internet», dice Dewever-Plana. Aun así, el codirector de Alma confiesa que este webdocumental no ha generado beneficio monetario para los autores y que en el campo del fotoperiodismo multimedia será necesario «crear un modelo económico viable que aún no existe».
World Press Photo: exposición y actividades paralelas
La muestra World Press Photo Barcelona se podrá visitar del 6 de noviembre al 8 de diciembre del 2013 en el CCCB, en horario de martes a jueves de 11 a 20 horas; los viernes de 11 a 21 horas, y los sábados, domingos y festivos, de 10 a 21 horas.
En el marco de la exposición, el 6 de noviembre a las 12 horas Miquel Dewever-Plana ofrecerá una masterclass en la Sala -1 del CCCB. El fotógrafo compartirá su experiencia en la creación, desarrollo y difusión del webdocumental Alma, que también ha sido galardonado con el primer premio Visa d’Or de la categoría Web Documentales del Festival Visa pour l’Image 2013 de Perpiñán.
A parte de esta masterclass, World Press Photo incluirá otras actividades paralelas.
+ info: http://www.cccb.org/es/exposicio-world_press_photo_13-44780
Twitter: #WPP13BCN