Seguimos reflexionando sobre las virtudes
Quizás a primera vista la paciencia no sea la virtud más atractiva si la comparamos con otras como el coraje o la dignidad. De hecho, el ímpetu, el movimiento, la rapidez o la vehemencia han sido normalmente objeto de admiración, mientras la paciencia se ha considerado el recurso de los débiles, de los que no pueden alcanzar directamente aquello que desean o no son capaces de rebelarse contra las circunstancias que les son adversas.
Por un lado, la paciencia es la capacidad para soportar y sobrellevar el infortunio y las ofensas, representada en el relato bíblico por Job, que resistió todo tipo de penurias sin perder su fe. Por otro, sin embargo, la paciencia es la virtud de los que saben esperar y aprovechar el momento oportuno, el “kairós” o tiempo de las posibilidades de la filosofía griega. En este sentido, la paciencia es quizás la virtud de los sabios y los experimentados, de los que saben que la solución no siempre se encuentra en la acción inmediata. Tal vez, ni siquiera en la acción. ¿Qué piensas tú? ¿Cuál habría de ser el papel de la paciencia en tiempos como estos, que valorar sobre todo la velocidad, la juventud y la inmediatez?
El próximo lunes 6 de febrero, el sociólogo Salvador Cardús compartirá con nosotros sus reflexiones sobre la paciencia en el marco del ciclo “Virtudes”. Según él, si la domesticación del tiempo –junto con la del espacio– es el hecho humano por excelencia, la paciencia es la expresión más genuina de nuestra capacidad de dominar la relación con la estructura temporal de nuestra vida.
Como hemos hecho con otros conferenciantes, también a Salvador Cardús le hemos pedido que nos sugiera un texto y una imagen para enmarcar su reflexión sobre la paciencia. Sus propuestas han sido el Tapiz de la Creación de Girona, un bordado del siglo XI o de principios del XII que representa la creación del mundo y la estancia del hombre en el Paraíso, y este fragmento del Eclesiastès (3, 1-8) que reproducimos a continuación:
Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo: un tiempo para nacer,y un tiempo para morir; un tiempo para plantar, y un tiempo para cosechar; un tiempo para matar, y un tiempo para sanar; un tiempo para destruir, y un tiempo para construir; un tiempo para llorar,y un tiempo para reír; un tiempo para estar de luto, y un tiempo para saltar de gusto; un tiempo para esparcir piedras, y un tiempo para recogerlas; un tiempo para abrazarse, y un tiempo para despedirse; un tiempo para intentar, y un tiempo para desistir; un tiempo para guardar, y un tiempo para desechar; un tiempo para rasgar, y un tiempo para coser; un tiempo para callar, y un tiempo para hablar; un tiempo para amar, y un tiempo para odiar; un tiempo para la guerra, y un tiempo para la paz.Y tú, ¿qué piensas sobre la PACIENCIA?
Como ya lo hemos hecho con la #moderación, la #fortaleza y la #dignidad, también tú puedes alimentar el debate a través de la cuenta @cececebe de Twitter: #PACIENCIA. Los canales también están abiertos para que puedas proponer las preguntas que te gustaría hacerle a Salvador Cardús, y nosotros seleccionaremos un par para planteárselas el próximo lunes.
Por otro lado, te recordamos que puedes encontrar los vídeos de las entrevistas y las conferencias de Tzvetan Todorov, Joanna Bourke y Claudio Lomnitz en nuestro web.