La sexta jornada I+C+i del año 2011 estuvo dedicada a las Humanidades Digitales, una nueva disciplina en la que la contribución y la transindividuación juegan un papel importante. La sesión se dividió en dos partes; una primera de presentación de proyectos del IRI, la Fundación Mozilla y Microsoft, y una segunda basada en una conferencia de Bernard Stiegler, director del IRI, y una mesa de debate con los representantes de estas entidades.
El IRI –Institut de Recherche et Innovation- del Centre Pompidou de París, cuyo presidente es Josep Ramoneda, trabaja y estudia las Humanidades Digitales, una disciplina que sustituye lo que anteriormente se había conocido en Francia como “ciencias auxiliares” y que tiene como principal reto repensar la forma en que se utilizan las tecnologías. Una de estas tecnologías es Polemic Tweet, desarrollada por el IRI con el objetivo de reconocer los “sentimientos” de los usuarios de Twitter. Mediante la misma herramienta o añadiendo una serie de parámetros (++ en acuerdo; — en desacuerdo, ++ para añadir referencia y ?? para lanzar una pregunta), Polemic Tweet se incrusta en un vídeo y cada vez que un participante interviene, su tweet queda anotado, de modo que es posible “leer” lo que se ha dicho en el momento en que se ha dicho.
Polemic Tweet fue la primera de una serie de herramientas que el IRI está trabajando y que se basan, sobre todo, en el uso colectivo del conocimiento y en las tecnologías de código y programación libre. Vincent Puig, codirector del IRI introdujo como ejemplo las Lignes du Temps, cronologías interactivas basadas en las “partituras anotadas” que se entregaban tiempo atrás en las óperas y que ahora se han convertido en herramientas tecnológicas didácticas.
Algunas de estas tecnologías creadas por el IRI han sido posibles gracias a Microsoft Francia, cuyo representatne, Pierre-Louis Xech, mostró durante la jornada algunos ejemplos. Nuevos dispositivos digitales como Xpaand y herramientas de presentación de datos como Krono-Miner, YouPivot o LiquidText son algunas de las novedades que se pudieron ver y que anticipan cómo será el mundo de las tecnologías en un futuro no muy lejano. Varias de ellas se han desarrollado gracias a Kinect, un dispositivo que Microsoft no creó únicamente como entretenimiento, sino como un verdadero lector interactivo en 3D con tecnología motion capture. Y es que la intención de Microsoft , como dijo Xech, “es que las máquinas sean cada vez más humanas”.
La jornada de la mañana finalizó con la presentación de dos proyectos creados desde la Fundación Mozilla: Hackasaurus, un “hackeador” de páginas web, y Universal Subtitles, una herramienta para traducir y subtitular páginas web. Ambas propuestas, siguiendo la filosofía Mozilla, se han creado con programación libre. Los asistentes a la sesión tuvieron la oportunidad de probar estas dos tecnologías con dos breves talleres que tuvieron lugar durante el mediodía.
Por la tarde, la sesión ICI tuvo como protagonista a Bernard Stiegler, filósofo y director del IRI, quien impartió la conferencia central de la jornada: Educación y contribución en el futuro de las Humanidades Digitales. Stiegler comentó la importancia de la escuela como lugar de prescripción, cuyo objetivo es fomentar la razón a través de varias disciplinas. Y describió lo que él llama “las retenciones terciarias”: aquellas basadas en el uso de la tecnología al servicio de la memoria. Por ejemplo, tomar notas es una retención terciaria. La idea de las retenciones se basa en el filósofo alemán Edmund Husserl, quien decía que nuestra conciencia retiene cosas en función de nuestros conocimientos y experiencias.
Para Stiegler, el reto actual es conseguir que las retenciones terciarias se pongan al servicio de nuevas formas de saber. Y, por ello, también es importante que las tecnologías formen parte del sistema educativo: si la manera de aprender a leer es aprendiendo a escribir, la manera de conocer las tecnologías es usándolas. Según el filósofo francés, la innovación debe pensarse desde un mundo global y contributivo, y las herramientas a desarrollar deben ser pedagógicas pero al mismo tiempo pensadas para todo el mundo.