Crónica de la jam session NOVA JAZZ CAVA – JAZZ TERRASSA
No podemos valorar aún cuan grande es el salto existente entre el antes y el después de “El siglo del jazz” en el CCCB. Lo que es seguro es que se han tendido nuevos puentes de complicidad entre música y público. Un éxito compartido por la diversidad de músicos y de gente que han dado calor a la Jazz Cava del CCCB durante estos meses de septiembre y octubre.
Una exposición que ha arrastrado a músicos y gente del mundo cultural a recorrer las huellas del jazz en la historia de diferentes manifestaciones artísticas del pasado siglo. Un ciclo de jam sessions que ha acercado “a menos de un metro” a los grandes músicos de jazz del país a las nuevas generaciones y a toda una variedad de público que ha llenado, jueves a jueves, durante dos meses, la Jazz Cava del CCCB.
El siglo del jazz es hoy más vivo que nunca. Ha llegado a nuestros días a través de la música en directo, la forma más cercana que tenemos en el siglo XXI para recordar lo que ha significado el jazz y la música para tantos y tantos creadores de todo el mundo.
Por esta razón, ha sido un doble placer concluir este ciclo de jam sessions “a menos de un metro” con el Club de Jazz de Amigos de las Artes de Terrassa. Un colectivo vinculado al jazz desde sus orígenes que ha sabido dar un espacio físico a la música en directo, pero también un espacio mental para propiciar el encuentro entre músicos de diferentes generaciones y entre figuras del país y nombres internacionales. Jazz Terrassa es, en pocas palabras, la meca del jazz y de la transmisión directa encima de los escenarios. Un ejemplo de lo que significa crear un nuevo presente siendo fiel a los orígenes.
Encabezado por Josep Maria Farràs, a la trompeta, uno de los referentes para varias generaciones, abrió la sesión un quinteto de músicos muy vinculados a la historia del Club de Jazz de Terrassa. Guim Garcia al saxo alto, Xavier Algans al piano, David Mengual al contrabajo y Oriol González a la batería.
Con la energía de Josep Maria Farràs encima del escenario recordamos los primeros pasos de “El siglo del jazz” en Barcelona, el día del concierto inaugural en La Pedrera en el mes de julio, en que Farràs participaba, junto con otros músicos de diferentes edades, de una relectura de la historia del jazz a través de una propuesta de Raynald Colom. La sesión se inició con algunos estándares reglamentarios. El quinteto se metió en el bolsillo a un público que parecía más numeroso que nunca. “I remember April”, “I remember You”, “You don’t know what love is” nos situaron en el punto en el que el jazz llega a todo el mundo: al grupo de treinta adolescentes que ocupaban el ala izquierda de la Jazz Cava, a los señores y señoras que estaban sentados cerca de las columnas del ala derecha, así como a los jóvenes que preferían escuchar la música tumbados en los pufs.
Como si las palabras fueran necesarias… llegó el momento de la voz en la Jazz Cava del CCCB. Gemma Abriè y Núria Palet se hallaban en la sala dispuestas a entrar en juego en cualquier momento. Primero lo hizo Gemma Abriè con toda una cantera de grandes trompetistas: Julián Sánchez y Alberto Pérez, que, junto con Guim Garcia al saxo, José Luis Castaño a la batería y Mengual al contrabajo, crearon un ambiente espléndido para este clásico de los años treinta, “Love for sale”.
En el siguiente tema, Josep Maria Farràs volvía incansable a la escena para completar aquel trío de trompetas tan deseado. “Tocar con él es un honor, un placer de los grandes”, decía Alberto Pérez. Farràs-Sánchez-Pérez, tres trompetas de primera línea, muy cerca de un público que admiraba a través de la pasión de los músicos las calidades de ese instrumento.
Y tras los fuertes aplausos, un gran silencio que introdujo la melodía de Gershwin “But not for me” en la voz de Núria Palet haciendo cuarteto con Santi Colomer a la batería, Mengual al bajo y Algans al piano. Mientras en el Pati de les Dones la gente seguía al fresco la proyección en la fachada de cristal, en el Hall todavía había cola de gente que esperaba para entrar. Nadie quería perderse la experiencia de formar parte de aquella confección musical en directo que, como si de un vestido se tratara, se ha ido enhebrando jueves a jueves para llegar a tener un color y una forma que todo el mundo quiere probarse y ver cómo le queda.
El batería Dani Domínguez y muchos de los músicos que han participado de las anteriores jams también estaban en esta última fiesta. Valentí Grau, director de la Jazz Cava de Terrassa, les animó a participar. Un maestro de ceremonias, como es a su modo Aurelio Santos, del Jamboree, y otros muchos en nuestra ciudad, que conoce a los músicos, que ama a la música y que nos enseña cómo entregarse y participar de la jam desde el público, ¡como el que más! También estaba entre el público Susanna Carmona, coordinadora del Club de Jazz de Amigos de las Artes de Terrassa, que, con su programa en ComRàdio y otras actividades, ha colaborado en la difusión de esta fiesta del jazz y, como no podía ser de otro modo, junto al escenario, incondicionales, los dos técnicos de sonido de las jam sessions del CCCB, dos profesionales entregados a la causa de la música que se ocupan habitualmente del sonido de la Jazz Cava de Terrassa, Marc y Oriol.
En la breve introducción y bienvenida habitual al principio de la sesión hubo un fuerte aplauso para todos ellos, y para el equipo del CCCB que ha creado de la nada un verdadero espacio de encuentro. Pero también para los músicos que han compartido sus abrazos, sus encuentros y su música con nosotros, que nos han dejado vivir de primera mano sus aciertos y sus errores. Y, por último, un aplauso para el propio público, que entre silbidos suelta también un fuerte ¡¡¡¡¡ohhhhhhhhh!!!!! al recordar que la semana próxima la Jazz Cava del CCCB ya no será el punto de encuentro. Pero hay que reunirse en algún otro de los rincones y espacios de la ciudad. Esperamos que el próximo jueves las jam sessions de todas partes estén más llenas. Músicos y público. Todo queda en el aire. Agradecimientos y aplausos para la música y para las personas. Un principio ideal para la creación de nuevos nexos.
Eva Vila, coordinadora de las CCCB Jam Sessions
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