Crónica de la jam sesion de JAZZ SÍ CLUB TALLER DE MÚSICS
¿Quién dice que el jazz es minoritario? Más de 700 personas pasaron el pasado jueves por la primera jam session en el CCCB. Con motivo de la exposición “El siglo del jazz”, abierta gratuitamente todos los jueves a partir de las 20 h, se ponía en funcionamiento una JAZZ CAVA CCCB que sorprendió a músicos y público por su autenticidad. Con la ayuda de las columnas de piedra de la planta –1 y el trabajo del equipo del CCCB, se creó un espacio de intimidad y de buena sonoridad digno de cualquier buena velada jazzística. Y así ocurrió. Mientras que el público formaba una cola que cruzaba el Pati de les Dones, la gente iba acomodándose en los pufs del suelo y en las columnas y los banquillos de la cava. Otros ocupaban los taburetes del bar y del chill out. A continuación, tras una breve presentación y bienvenida, el cuarteto base que había elegido el Taller de Músics, uno de los núcleos más activos del jazz y la música moderna en nuestra ciudad, iniciaba la jam session. Joan Díaz al piano, profesor y subdirector de la nueva escuela de Grado Superior del Taller de Músics, Rai Ferrer al contrabajo, David Gómez a la batería y el joven Gabriel Amargant al saxo tenor, los dos también profesores del Taller. Los cuatro iniciaron la sesión con una especie de homenaje al segundo quinteto de Miles Davis con temas como “Sorcerer”, “E.S.P.” y “One finger SNAP”, creando un óptimo ambiente entre el público que se iba haciendo suya la sala y que aplaudía con fervor después de cada solo. A continuación, fue Javier Galiana, pianista andaluz ex-alumno de la ESMUC (Escuela Superior de Música de Barcelona), quien rompió el hielo y subió a la tarima, iniciando el movimiento de músicos y la participación espontánea intrínseca de una jam. Con un golpecillo a la espalda de Joan Díaz, el piano quedaba libre para que Galiana ocupara el banquillo y pactara con los demás compañeros de escenario hacia dónde debía proseguir la sesión. Y lo hizo con uno de los estándares más conocidos, “You know that I love you”. Una balada que nos puso la carne de gallina y creó un silencio conmovedor entre todos los que nos encontrábamos entre el público. Mientras tanto, en el exterior, en el Pati de les Dones, la cola había desaparecido y un buen número de personas seguían la jam sentadas en el suelo o en el banco de mármol, aprovechando el magnífico clima fresco de la noche y disfrutando de la fantástica realización de la sesión que se estaba desarrollando en directo desde el interior de la cava.
